Existen muchas opciones para aprender inglés, pero sin duda lo más recomendable es el aprendizaje del idioma con profesores nativos o angloparlantes. Son muchas las ventajas adicionales a tener en cuenta.

La experiencia en cursos de inglés con profesores nativos siempre será positiva al margen de la decisión sobre qué método de aprendizaje nos puede encajar mejor. Aprender inglés con un nativo merece la pena y a continuación enumeramos algunos beneficios que puede aportar:

• Mejor pronunciación y más natural

La pronunciación es uno de los aspectos más complicados para los hispanohablantes cuando se plantean aprender inglés. La manera más eficaz de mejorar la dicción y el acento inglés es con un nativo, ya que, al ser su lengua de origen, nadie como él lo dominará. Además, hablar con un profesor nativo hará que mejore nuestra comprensión auditiva.

• Acceso al inglés más auténtico

Con un profesor angloparlante, estaremos en contacto con un inglés más real. Durante las clases, conseguiremos asimilar la jerga del idioma de una forma más natural.

• Detección de errores de gramática

Un profesor nativo apreciará con mayor facilidad los errores gramaticales que cometamos.

• Mayor dominio del vocabulario y de las expresiones

Difícilmente un profesor no nativo tendrá el mismo nivel de vocabulario que uno que sí lo es. Esto es especialmente interesante en lo que se refiere al lenguaje coloquial, es decir, la parte del idioma que se aprende en el transcurso de la vida.

• Mejor comprensión del uso de los verbos

El aprendizaje de los verbos es todo un reto. Los tiempos verbales, las formas irregulares… todo será más sencillo con un profesor nativo, especialmente en lo relativo a aquellos verbos cuyo significado es el mismo pero su utilización varía según la situación.

• Clases más relajadas

Un profesor nativo se siente cómodo con su propio idioma y lo emplea de una forma más tranquila y amena. Al ser su lengua materna, está menos pendiente de la gramática porque la domina de forma inconsciente. Por esta razón, las clases de inglés con un profesor nativo pueden ser más divertidas y relajadas.

• Lenguaje más actual

Al estar en contacto con su lengua de origen, un profesor nativo hablará un inglés adaptado a la actualidad y sus expresiones estarán más próximas a la realidad.

• Mayor conocimiento de la cultura de su país

Otra ventaja de aprender inglés con un nativo es que nos enseñará cuestiones relacionadas con las costumbres de su país. Acceder a curiosidades y datos interesantes es una forma de enriquecer el aprendizaje de un idioma.

Las ventajas de aprender inglés con un profesor nativo son muchas, pero es importante tener en cuenta que no es el único aspecto relevante para enseñar correctamente un idioma. Ser nativo no implica ser buen profesor, ya que éste deberá ser además un profesional de la docencia con una buena metodología y con experiencia.

En el proceso de aprendizaje, uno de los retos más importantes es la pronunciación. Ya hemos visto que aprender inglés con un profesor nativo nos puede ayudar notablemente a mejorar ese aspecto. Además, es conveniente hablar en inglés siempre que sea posible y poner en práctica unos sencillos consejos:

• Escúchate. Corregir y mejorar tu pronunciación en inglés es difícil si no escuchas tus errores. Una forma de hacerlo es grabándote mientras hablas y comparando después tu pronunciación con la de un nativo.

• Ve despacio. Si hablas a mucha velocidad, es más difícil corregir los malos hábitos adquiridos. Habla con tranquilidad y practica algo básico cada día.

• Visualiza la pronunciación. Antes de expresarte en inglés, cierra los ojos y piensa en cómo se pronuncia cada sonido que vas a emitir. Intenta visualizar la posición de la boca, la lengua y los labios.

• Practica las posiciones de la lengua. La pronunciación es una habilidad física. La lengua tiene que aprender otras formas de moverse y utilizar músculos diferentes. Céntrate en unos cuantos sonidos difíciles cada día.

• Obsérvate. Sitúate delante de un espejo y observa cómo colocas los labios y la lengua cuando pronuncias ciertos sonidos. En internet existen multitud de vídeos de pronunciación con los que podrás comparar tu forma de posicionar la boca al hablar.

• Imita a los expertos. La mejor forma de aprender es observando cómo hablan las personas que tienen el inglés como lengua materna. Puedes escuchar programas de radio o de televisión o ver películas sin leer los subtítulos. Intenta imitar su forma de hablar, aunque no lo entiendas todo.

• Practica solo. Tenemos miedo a cometer errores, por lo que los problemas de pronunciación persisten. Puedes practicar solo imaginando situaciones (pides en un restaurante, preguntas cómo llegar a algún lugar, etc.) y representar el diálogo. Así conseguirás vencer tu timidez.

• Busca un compañero de aprendizaje. Si encuentras a alguien interesado en aprender inglés como tú, podéis intercambiar comentarios objetivos sobre vuestra pronunciación. Incluso podéis escuchar conjuntamente vuestras grabaciones y comentar los errores cometidos con el fin de ayudaros a mejorar en el aprendizaje.

• Lee textos y poesías. Pronunciar correctamente no es solo dominar unos sonidos básicos. Es entender la entonación (subidas y bajadas en el tono) y la acentuación. Leer poemas, discursos o cantar canciones en voz alta te ayudará, siempre que te concentres en la acentuación de las palabras y en la entonación.